Emprendiendo un nuevo viaje y, lamentablemente para la aviación comercial española, una nueva etapa lejos de nuestros aeropuertos ya con su nuevo registro.
Simple pero uno de mis aviones favoritos por lo aleatorias que son sus visitas. Hoy no se escapó. Rodando al Pabellón de Estado después de haber tomado en la 33R.
Una auténtica lástima. Remolcado después de haber realizado pruebas estáticas en la zona de aislamiento para prueba de motores, debe de estar cerca su entrega a un nuevo operador con un nuevo registro.
Menuda sorpresa y alegría. Después de ser un tanto escurridizo, por fin lo cazo. Con la sierra nevada de fondo, rodando al pabellón de estado para un próximo vuelo con nuestras personalidades a bordo.