CN: 2003. En el mismo pueblo donde se coge el ferry para ir a Geiranger, me encontré esta Ecureuil "butanito". Al parecer es bastante habitual el encontrarse helicópteros por la zona, una manera fácil de transportarse sobre todo en invierno.
Hay un refrán que dice "Si quieres trabajo, cómprate una Navajo". Estos aviones se caracterizan por la complejidad de su operación, con hasta 5 depósitos de combustible, hay versiones presurizadas... vamos, que el piloto no se aburre.
Mi primer vuelo a Trondheim fue a finales de 2001 en un 737-800 de Futura. 10 años después vuelvo, en un avión más pequeño, pero sentado en un sitio privilegiado. En corta final a la 09.