El amerizaje en la bahía de Pollensa, sobretodo a ciertas horas, puede ser un problema por el exceso de tráfico de superficie de todo tipo, lo que obliga a los pilotos a aprovechar cualquier hueco. Aquí vemos al avión aparentemente metido en el puerto militar con el puerto deportivo y la playa al fondo. Parte de este “efecto” es por el zoom largo al estar la foto disparada desde la plataforma interior junto al hangar.