Una auténtica lástima. Remolcado después de haber realizado pruebas estáticas en la zona de aislamiento para prueba de motores, debe de estar cerca su entrega a un nuevo operador con un nuevo registro.
Menuda sorpresa y alegría. Después de ser un tanto escurridizo, por fin lo cazo. Con la sierra nevada de fondo, rodando al pabellón de estado para un próximo vuelo con nuestras personalidades a bordo.